Hay tantas recetas de torrijas con miel como personas que las hacen. Pero, como es lógico, no todas tienen el mismo resultado. Si quieres asegurarte de que tus torrijas queden muy esponjosas y de que tengan un sabor increíble, tienes que probar a hacer nuestra receta.
¿Quieres que te contemos nuestro secreto para que las torrijas siempre nos salgan perfectas? La clave del éxito está en la elección del pan. Te recomendamos que elijas un pan de miga densa, para que absorba bien la leche. Si este pan es del día anterior, mucho mejor, porque ya habrá perdido parte de su humedad y esto favorece que el interior se quede tierno.
Bueno, no queremos hacerte esperar más, así que pasamos ya a indicarte paso a paso cómo hacer las torrijas con miel. ¡Disfruta de esta receta!
Ingredientes
- 1 barra de pan (¡ten en cuenta nuestras recomendaciones!)
- 800 ml de leche entera
- 2 o 3 cucharadas de miel (depende de lo dulces que quieras que te queden las torrijas)
- 2 huevos
- Aceite de oliva para freír
- 2 cucharaditas de extracto de vainilla
- 1 cucharada de azúcar
- 1 cucharada de canela
- Ralladura de un limón
Elaboración
- Pon leche a hervir en un cazo grande. Añádele las dos cucharaditas de extracto de vainilla, la miel natural y la ralladura de limón. Es importante que lo remuevas todo bien para que la miel se deshaga en la leche.
- Corta la barra de pan en rodajas de 3 centímetros aproximadamente y ponlas en un recipiente ancho.
- Cuando la leche empiece a hervir, baja el fuego al mínimo. Después, sumerge cada rebanada de pan en la leche (puedes utilizar una espumadera) hasta conseguir que todas las rebanadas se hayan empapado bien.
- Pon a calentar el aceite en una sartén y, mientras se calienta, aprovecha para batir los huevos.
- Cuando el aceite ya esté caliente, saca las rebanadas de pan de la leche y pásalas por el huevo batido.
- A continuación, mete las rebanadas empapadas de huevo en la sartén para que se frían. Con unos minutos por cada lado debería bastar para que tus torrijas queden bien doradas.
- Cuando se hayan quedado con el aspecto deseado, sácalas y ponlas en un plato con papel de cocina para que absorba el exceso de aceite.
- Por último, espolvoréalas con un poco de azúcar y canela. ¡Listo!
Aparte de estas indicaciones, te dejamos por aquí un vídeo por si te ha quedado alguna duda. Ver el proceso de elaboración de cualquier receta siempre nos parece muy buena opción 😛